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Un coche eléctrico, coche eléctrico de batería o coche totalmente eléctrico es un automóvil que se propulsa mediante uno o varios motores eléctricos, utilizando únicamente la energía almacenada en las baterías. En comparación con los vehículos con motor de combustión interna (ICE), los coches eléctricos son más silenciosos, no tienen emisiones de escape y tienen menos emisiones en general.[1] En Estados Unidos y la Unión Europea, a partir de 2020, el coste total de propiedad de los vehículos eléctricos recientes es más barato que el de los coches ICE equivalentes, debido a los menores costes de combustible y mantenimiento.[2][3] La carga de un coche eléctrico puede realizarse en una variedad de estaciones de carga; estas estaciones de carga pueden instalarse tanto en casas como en zonas públicas.[4]
En todo el mundo se vendieron 6,6 millones de coches eléctricos enchufables en 2021, duplicando con creces las ventas de 2020, y alcanzando una cuota de mercado del 9% del mercado mundial de coches nuevos[5] Los coches totalmente eléctricos representaron el 71% de las ventas de coches enchufables en 2021[6] En diciembre de 2021[actualización], había 16 millones de coches eléctricos enchufables en las carreteras del mundo. [5] Muchos países han establecido incentivos gubernamentales para los vehículos eléctricos enchufables, créditos fiscales, subvenciones y otros incentivos no monetarios, mientras que varios países han legislado para eliminar gradualmente las ventas de coches de combustible fósil,[7][8] para reducir la contaminación del aire y limitar el cambio climático.[9]
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El uso de los coches eléctricos varía en todo el mundo, ya que la adopción de los vehículos eléctricos enchufables se ve afectada por la demanda de los consumidores, los precios del mercado, la disponibilidad de la infraestructura de recarga y las políticas gubernamentales, como los incentivos de compra y las señales normativas a largo plazo (mandatos ZEV, regulaciones de las emisiones de CO2, normas de ahorro de combustible y la eliminación progresiva de los vehículos con motor de combustión interna)[1].
Los vehículos eléctricos enchufables (PEV) se dividen generalmente en vehículos totalmente eléctricos o de batería (BEV), que funcionan sólo con baterías, e híbridos enchufables (PHEV), que combinan la energía de la batería con los motores de combustión interna. La popularidad de los vehículos eléctricos ha crecido rápidamente gracias a las subvenciones gubernamentales, a su mayor autonomía y menor coste de las baterías, y a su sensibilidad medioambiental. Sin embargo, el parque de coches eléctricos enchufables representaba sólo el 1% de todos los vehículos de pasajeros en las carreteras del mundo a finales de 2020, de los cuales los eléctricos puros constituían dos tercios[2].
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La Movilidad Eléctrica es una realidad en Colombia, el 6 y 7 de noviembre, WEC Colombia realizó el III Encuentro Internacional de Movilidad Eléctrica con una asistencia de 1150 personas, la presencia de tres ministros y un viceministro. Aquí se trataron los siguientes temas La política de las 3D (descarbonización, digitalización y descentralización) se está imponiendo en todo el mundo, y Colombia está trabajando para seguir esta tendencia. La Movilidad Eléctrica juega un papel clave en esta política al aumentar la electrificación de las ciudades, teniendo en cuenta que un vehículo eléctrico puede requerir la misma cantidad de energía que de 1 a 3 hogares.
El Gobierno Nacional viene trabajando en varias medidas para impulsar el crecimiento de la movilidad eléctrica y garantizar la sostenibilidad del sector. En el Plan Nacional de Desarrollo y en la Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica se han definido diferentes aspectos con el objetivo de lograr la movilidad eléctrica. Se estipula que se deben crear estrategias y políticas para promover el transporte sostenible, también, crear y fortalecer el marco normativo, político e institucional para facilitar la entrada de los vehículos eléctricos al mercado, así mismo, se estipula el programa de sustitución del parque automotor oficial y público. Y en la Ley 1964 de 2019, esta ley señala, entre otros aspectos, los beneficios e incentivos que hay para adquirir este tipo de vehículos.
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En el marco de la cumbre de movilidad sostenible organizada por Latam Mobility, se celebró un panel denominado «Sector energético y transporte público: Alianza para la Movilidad Sostenible», conformado por representantes de empresas como Enel, Celsia, Terpel, Vanti y BYD; quienes destacaron la importancia de los recursos cero emisiones y el apoyo del sector privado para el desarrollo en Colombia.
El bloque fue moderado por Kathrine Simancas, directora de energía y gas de Andesco, quien inició el debate consultando a los protagonistas sobre los proyectos que se han aplicado en el país cafetero, así como los planes futuros de las empresas que representan.
Al referirse a las estrategias de movilidad sostenible, Luis Felipe Vélez de Celsia destacó que la empresa viene visualizando la importancia de trabajar en el movimiento eléctrico desde hace 3 años y medio, por lo que han trabajado para crear una división específica.
«Formulamos posibles alternativas o soluciones al respecto y tenemos tres focos de trabajo: Autobuses de transporte masivo tanto en Bogotá como en Cali con una flota de 146 buses, tenemos un frente de infraestructura con dos grupos y un ecosistema de movilidad donde hicimos una alianza entre Bancolombia, Sura y Celsia y armamos una spin-off y ahí tenemos 100 vehículos eléctricos de dos plazas con un servicio de movilidad compartida», dijo Vélez.